viernes, 25 de octubre de 2013

Una de las Bendiciones que tenemos...

Una de las bendiciones que hemos tenido en Iglesia de Jesucristo Palabra La Vida Verdadera en Melchor de Mencos, es que hemos aprendido a trabajar en la obra, parece fácil pero solo el que ha llego a las 5 de la mañana un día domingo, sabe que es luchado.

Para empezar, el pollo hay que tenerlo desde el día sábado a mas tardar en la tarde para que corten las piezas, los condimenten y lo dejen reposar para que se marine y tenga un buen sabor. También hay que limpiar el frijol para el delicioso rice and beans. Levantarse temprano UN DOMINGO es de admirar, normalmente los domingos son para descansar y disfrutar con los hermanos, los tíos los abuelos los sobrinos, salir a pasear a un lugar en fin es un día en que uno se toma su tiempo para todo, lo que menos se piensa es que ese día lo vas a trabajar, levantándote de tu cama a las 4 de la mañana para que a las 5 estés en la cocina de la iglesia fresquito para jalar las ollas o peroles en donde se va a cocer el arroz y el pollo, llevar los utensilios que se van a utilizar, empezar a juntar fuego, y si no hay leña porque de plano al hermano encargado de rajar los trozos no rajo leña, pues mas que ponerse a rajar leña para luego juntar fuego.

Son las 6 de la mañana y te vas dando cuenta como se va aclarando el día, algunos herman@s empiezan a llegar. Empiezan a picar las verduras, ponen a cocer las papas y las zanahorias, ponen unos huevos a endurar, se jala la parrilla para asar el pollo, se espera que haya brazas para ponerla debajo de la parrilla y luego pasarle cebolla para que no se peque el pollo, mientras tanto las hermanas cocinando el arroz, otras amasando harina para hacer las tortillas de harina para el Bar B Q (barbacoa).

En fin... uno ve a los hermanos y hermanas contentos, escuchando Radio Manantial 98.5 fm con una pequeña radio que le decimos la chicharra, todo mundo haciendo algo, cocinando, compartiendo pero también, como dice la biblia puliéndose, porque no falta quien se haya sentido ofendido porque le dijeron que lo que estaba haciendo no lo hacia bien, y aunque se sabe que se hace con el mayor esmero siempre hay un NUEVO que esta aprendiendo. Eso pasa aquí y en la china.

Por eso digo... tenemos la mayor bendición que es el trabajo para la obra y aunque sabemos que las ganancias económicas no son significativas para la gran labor que se hace, es mayor la recompensa que tenemos al saber que estamos compartiendo tiempo con los herman@s y a la vez ganamos paciencia y aprendemos a tener misericordia.  Porque sabemos que nos tienen paciencia a nosotros y por eso debemos de ser reciproque.

Pero mejor les dejo unas imágenes de l@s herman@s trabajando para la obra de Dios.

(para la próxima les relato que pasa durante las ventas y por ultimo cuando ya se termino de vender, Quien lavara todos los trastes sucios?)